Que no se dé como limosna lo que ya se debe de justicia.
Y que antes de hacer caridades baratas, regalitos, fiestas navideñas, etc.,
revisemos nuestra justicia social,
que no puede haber paz de Navidad
si no hay verdadera justicia en las relaciones de los salvadoreños.
¡Es esa la Paz que anhelamos!” …
No busquemos a Cristo
entre las opulencias del mundo,
las idolatrías de la riqueza,
los afanes del poder,
las intrigas de los grandes.
Allí no está Dios.
Busquémoslo entre
los niños desnutridos que
se han recostado esta noche
sin tener qué comer.