SALMO AL DIOS ENTERAMENTE BUENO (Pedro Trigo, Caracas, 1983)



SALMO AL DIOS ENTERAMENTE BUENO

Señor, Dios nuestro, te queremos dar gracias

porque en Jesús te has revelado

como un Dios Enteramente Bueno.

En esto no te pareces a nosotros;

en esto te diferencias de todas las imágenes

que, sublimándonos, nos hacemos los hombres de ti.

Tú amas todo lo que has creado;

tú has establecido con nosotros una alianza eterna

y nada podrá quebrantarla.

Por eso no te enfureces con nuestros pecados

ni tomas venganza de los que obran el mal;

no matas a los que matan

sino que los proteges, como a Caín, de sus vengadores.

Porque eres enteramente bueno

haces salir el sol sobre justos y pecadores.

Es que amas a cada uno

y no quieres la muerte del pecador

sino que se convierta y viva.

A todos nos perdonas los pecados

y haces sentar a la misma mesa,

al que llegó a última hora

y al que trabajó desde el amanecer.

Te damos gracias porque en todo esto te revelas

como Enteramente Bueno.

Estás tan apartado del mal

estás tan ajeno a todos los mecanismos del mal

que ni siquiera castigas a los transgresores

para no añadir violencia a nuestras violencias.

Tú no tienes el poder de matar

porque ese no es un poder divino.

Tu poder es amar sin medida

crear, sanar, perdonar

y hasta triunfar de la muerte.

Tu justicia no es tasar y medir

sino hacernos justos

y reconciliarnos por fin en esa justicia de vida.

Dios nuestro, estamos contentos

de que tú seas nuestro Padre,

y puesto que nos hiciste a tu medida

danos un corazón generoso como el tuyo.

Foto: Cláudio Carvalhaes

Leave a Reply

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.